Hace varios años el personaje Wall-E, protagonista de una película de Pixar del mismo nombre, conquistó a miles de personas alrededor del mundo. Muchos soñabamos soñaban con tener uno de estos robots encargados de recoger la basura.
Un hombre no se quedó con las ganas e hizo su propio Wall-E. El resultado fue francamente sorprendente.
Esta maravillosa replica fue realizada por Michael McMaster, un experto en robótica que ya era famoso por construir copias del emblemático R2-D2 de Star Wars, trabajo que desarrollaba ayudado por varios de sus amigos en un taller que instaló en su casa. Tras ver la película de Wall-E decidieron crear su propia versión de este robot enamoradizo.
Esta tarea, dice McMaster, fue mucho más complicada que la creación de R2-D2, pues significaba darle vida a un robot que sólo era una animación.
Tras elaborar varios diseños, ver la película en repetidas ocasiones en formato de alta definición y cuidar cada detalle para que la estructura del robot fuera idéntica a la del personaje, el Wall-E de la vida real quedó listo. Además de ser una réplica exacta en cuanto a su apariencia, los sonidos y movimientos del robot también son fieles a los de la cinta animada.
Échenle un ojo, seguramente más de uno lo querremos querrá tenerlo:
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